Tras un largo confinamiento, muchos necesitan irse de vacaciones. Sin embargo, el coronavirus nos ha hecho tener que reinventarnos en todos los aspectos de nuestra vida. Lejos quedaron o por lo menos, durante un tiempo, los viajes turísticos por el mundo, puesto que debemos evitar grandes aglomeraciones y mantener en la medida de lo posible la tan universal en estos tiempos, distancia de seguridad.
Por esta razón, el plan perfecto para unas buenas vacaciones es escaparse con la familia al medio rural. Poder respirar aire fresco, tener intimidad y evitar todo contacto físico con personas ajenas al vínculo familiar solo lo podemos encontrar rodeados del medio natural.
Precisamente, un lugar perfecto para todo ello es A Porteliña, una casa rural totalmente reformada situada a las afueras de la ciudad de Vigo. Tres dormitorios, finca, piscina, garaje son algunas de las comodidades que puede ofrecernos este pequeño refugio rural. Además, no podemos olvidarnos de la chimenea ya que ahora que llega el invierno es sin duda, uno de los puntos fuertes de A Porteliña.
Además, A Porteliña se encuentra próxima a lugares de ocio como las termas al aire libre de Rivadavia y Salvatierra, la pista de golf de Mondariz, las playas fluviales de Covelo-Pontevedra o las Islas Cíes.
Pueden disfrutar de la paz y tranquilidad de la zona, así como de sus maravillosas vistas, además podrán hacer senderismo, la ruta del Xabriña parte justo al lado de la vivienda, también de termas al aire libre de Rivadavia y Salvatierra además del Spa de Mondariz Balneario, de las playas de las Rias Baixas que están situadas a 40km, así cómo de las playas fluviales de Covelo-Pontevedra, del río de la Freixa en Ponteareas.
Un lugar donde encontrar la paz y tranquilidad que parece que hemos perdido a lo largo de este año. Sobre la situación actual del sector, hablamos con Rosa, la responsable de A Porteliña.
A Porteliña tras el Covid-19
¿Qué medidas tomaste y tomarás frente al COVID19?¿Cómo afectó la cuarentena A Porteliña? Las medidas que he tomado ha sido la desinfección total de colchones, ropa de cama, toallas… He tenido que airear toda la casa antes de proceder a la limpieza y posterior desinfección. Además, he colocado gel hidroalcohólico en la entrada de la casa. Por otra parte, la cuarentena me ha afectado, ya que he tenido que estar cerrada todo el tiempo de alarma. Hasta que permitieron la apertura de casas vacacionales he tenido que cancelar muchas reservas que tenía.
¿Cómo ves el futuro dentro de unos meses dentro de tu sector? El futuro lo veo bien. Las casas como la mía son las ideales para descansar en familia y no compartir espacios con gente extraña. Los huéspedes tienen toda la propiedad, incluida la piscina, para ellos solos. Se sienten más seguros.
Como Empresa Gallega, ¿qué nuevos servicios o productos quieres aportar a tus clientes? Seguiré como hasta ahora aportando calidad. Intentaré transmitirles cómo se vive en el rural gallego. Sigo regalando el primer desayuno.
¿Qué nuevas necesidades percibes de tus clientes?¿Notas un cambio en ellos? Los clientes necesitan tranquilidad e intimidad. He notado que ahora son de zonas más cercanas debido al miedo a viajar. También este verano he tenido clientes Vascos, Madrileños, Castellanos, Valencianos… pero los más abundantes han sido gallegos.
¿Cuál dirías que es actualmente el producto más demandado por los clientes? Casas rurales o en el rural que tengan piscina y sobre todo que les permitan llevar a sus mascotas como llevo haciendo yo desde el principio.
Imágenes cedidas por Casa Rural A porteliña.
Artículo escrito por Uxía Rodríguez