Galicia tiene casi 1.500 kilómetros de costa y más de 700 playas en las que disfrutar del Atlántico y el Cantábrico. Las hay salvajes, urbanas, familiares, calas de difícil acceso, para surfistas… en las que pasar una (o varias) jornadas únicas en contacto con el mar. Si estás pensando en un plan para este verano y no quieres perderte alguna de las mejores playas de Galicia, toma nota de la propuesta que te hacemos desde Vigoplan.
Si no quieres perderte alguna de las mejores playas de Galicia, toma nota de la propuesta que te hacemos desde Vigoplan
Desde los mansos y suaves arenales de las Rías Baixas que invitan al descanso y al baño, hasta los furiosos y bravos de las Rías Altas, batidos por el viento hasta las hermosas playas del Cantábrico se encuentran algunas de estas joyas naturales. Además muchas de ellas son consideradas como Playas de bajo grado de ocupación y son ideales para disfrutar de la arena con seguridad y tranquilidad. A mayores playas como las de Las Catedrales o las Playas de las Islas Cíes tienen un sistema de citas previas para limitar y asegurar su aforo con el objetivo de mantener su ecosistema. Empezamos. Toma nota de nuestras recomendaciones.
Las Catedrales (Ribadeo, Lugo)
Una playa en lo que lo importante no es tomar el sol en tranquilidad, ni su arena blanca ni unas dimensiones extraordinarias. Lo que hace excepcional a Las Catedrales son sus acantilados que, de manera natural, han formado todo tipo de arcos y cúpulas que le han valido para acuñarla como “la catedral del mar”, ya que su nombre real es Aguas Santas. Cuando la visitemos es fundamental tener en cuenta dos cuestiones: las mareas, ya que si está alta a penas se aprecian las formaciones y casi no hay espacio para pasear, y que el acceso es limitado en verano (de julio a septiembre) para evitar aglomeraciones.
Cíes (Vigo, Pontevedra)
Las islas Cíes son un lugar único que forman parte del Parque Nacional Illas Atlánticas. Están en la ría de Vigo aunque su arena blanca y sus aguas de color turquesa nos hagan soñar que nos encontramos en el Caribe. El acceso a Cíes es limitado (3.000 personas al día) y sólo se pueden visitar dos de las tres islas (Monteagudo y Faro). En esta última se localiza Rodas, considerada una de las mejores playas del mundo. Es el primer arenal que nos encontramos justo al bajarnos del barco que nos traslada a este pequeño paraíso. Si nos animamos a caminar un poco podremos disfrutar de otras ocho playas únicas menos concurridas, como la de Figueiras o Bolos.
Area Maior (Muros, A Coruña)
Si buscas una playa que conserva su lado más salvaje Area Maior, en Louro, es una gran opción. Sus vistas al monte Louro, la laguna de Xalfas y su cordón dunar son elementos que la hacen excepcional. La tranquilidad por encontrar sitio seguro a metros de otras personas está garantizada. El fuerte oleaje y el viento hacen que sea frecuentada por surfistas.
Carnota (A Coruña)
Sus siete kilómetros la convierten en la playa más larga de Galicia, que no de España, (con la marea baja el ancho es de 500 metros). Sus medidas espectaculares se complementan con un extenso sistema dunar y una zona de marismas (Caldebarcos) de gran interés ecológico por las aves y flora que alberga. Carnota es perfecta para pasear, pasar un día de playa sin agobios y practicar deportes como el surf o windsurf. Y todo con unas vistas espectaculares al monte Pindo.
As Furnas (Xuño, Porto do Son, A Coruña)
Otra playa salvaje que, en este caso, se hizo famosa de forma involuntaria por ser el lugar en el que tuvo el accidente Ramón Sampedro, cuya historia llevó al cine Alejandro Amenábar. En ella también se rodaron algunas de las escenas de la serie “Fariña” sobre el narcotráfico. Es un arenal de mar abierto y oleaje en el que se crean piscinas naturales, sobre todo cuando baja la marea. Su aspecto natural y casi virgen no impide que esté dotada de aparcamiento, duchas y servicio de socorrismo.
A Lanzada (O Grove, Pontevedra)
Casi tres kilómetros de arenal con uno de los ecosistemas dunares más importantes del litoral gallego. Su paseo de madera facilita el acceso a una playa de arena fina con restos arqueológicos de un castro, una necrópolis romana y una ermita románica. La magia de A Lanzada no sólo está en su aspecto natural sino también en el cultural; la tradición dice que el “baño de las nueve olas” ayuda a las mujeres con problemas de fecundidad a quedarse embarazada.
Barra (Cangas)
En esta selección de algunas de los mejores arenales de Galicia no podíamos dejar pasar Barra, una de las mejores playas nudistas de la comunidad. Con vistas a la ría de Vigo y las islas Cíes, su acceso se hace a través de un pinar que le da intimidad y aumenta su aspecto virgen. Su arena blanca y sus aguas turquesas la convierten en un pequeño paraíso.
Corrubedo (Riveira)
Este Parque Natural es, en realidad, no una sino cinco playas unidas durante cinco kilómetros consecutivos. En ellas está garantizado que no habrá masificaciones y que se disfrutará de un paisaje único en el que destaca una duna móvil (casi un kilómetro de longitud y entre 15 y 20 metros de altura) y la laguna de Vixán. La playa principal es la de O Vilar.
Doniños (Ferrol, A Coruña)
Una playa que combina sus características salvajes con la dotación de servicios como aparcamiento y acceso para minusválidos. Está emplazada en un entorno único con una laguna del mismo nombre. El oleaje de Doniños durante todo el año hace que sea un punto de encuentro para los amantes del surf.
Arealonga (O Vicedo, Lugo)
Arenal con forma semicircular con algo más de un kilómetro en un entorno único junto a la desembocadura del río Sor entre O Vicedo y O Barqueiro. La mayoría de la playa está rodeada de zona boscosa y sus aguas tranquilas -a diferencia de otras de la zona- la convierten en un sitio perfecto para ir con niños pequeños. Está equipada con paseo y zona de picnic.